Marco Mendoza

Ser parte de la música

Fue bajista de Whitesnake, de Bill Ward, de John Sykes, de Ted Nugent y de George Lynch, entre otros. Actualmente, además de tener una carrera como solista, gira por el mundo con la banda Thin Lizzy. Su último disco se llama “Casa Mendoza”, donde vuelca todas sus raíces, que van del rock a la música afrocubana y al R&B.

“Casa Mendoza” es un disco un poco más amplio que el anterior, “Living for Tomorrow” (2007), ya que se su estilo se aleja un poco del rocanrol. Mascot Records me propuso hacer algo similar a lo que venía haciendo con el trío que tengo con Renato Neto y Joey Heredia, pero sumando a un guitarrista. En el disco toca Steve Weingart, tecladista de la banda de Steve Lukather (Toto), porque Renato estaba de gira con Prince. También grabaron Rafael Moreira, guitarrista de Cristina Aguilera, Pink y Paul Stanley, y Joey Heredia en batería. Para ser honestos, es un proyecto que armamos un poco de apuro. Como al sello le interesaba que este proyecto alcanzase a la comunidad latina, hicimos también una canción en español (“Tu”). En “Casa Mendoza” hay además de temas propios, algunos covers como “Living in the City” de Stevie Wonder, “Suzy Q” y “You Got a Friend” de Carole King. Estos covers los venía haciendo con el trío, cuyo estilo giraba más en torno al latin/jazz/funk. En realidad, tengo una larga lista de temas que me gustan, y que trato de deformar y cambiar. Y a la gente le gusta mucho, porque son temas que reconoce al instante, a pesar de lo retorcido que sea el arreglo (risas).

DIVERSIDAD Me gusta hacer distintos tipos de música, y creo que ser un artista trata justamente de tomar ciertos riesgos. En la actualidad estoy muy ocupado tocando con Thin Lizzy y con mi proyecto de rock, con el que hago temas de mi disco anterior “Living for Tomorrow”. Este disco fue producido por Richie Kotzen. Él es muy talentoso y multifacético. Como guitarrista puede tocar lo que sea. Fue muy fácil trabajar con él, ya que como productor es muy focalizado. En mi caso, yo trato que las cosas sean perfectas, y él es una persona muy práctica, que sabe cómo captar la vibra del momento. También es muy buen vocalista, y como ingeniero, sabe mucho de Protools. Éste fue otro disco que hicimos a los apurones, ya que nos llevó 16 o 17 días entre grabación y mezcla. Además, fue genial poder contar entre los invitados a Ted Nugent, Doug Aldrich, Tommy Aldridge, Steve Lukather, etc.

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