Alejandro Medina

El bajo, el mate y el blues

El legendario bajista de Manal, La Pesada y Aeroblus acaba de sacar “Yo soy”, su quinto disco como solista, con invitados como Charly García, Ciro Fogliatta o Luis Alberto Spinetta, entre otros. Además de contarnos acerca de su gestación y grabación, Medina recuerda su paso por estas bandas insignes del rock nacional.

“Yo soy” es una obra de quince temas, donde no me importó seguir una línea definida. Además, como soy yo el que canto, me gustan los mensajes que mando. No es el típico disco de blues o rocanrol, donde mantienen una línea y todo es mas previsible. Acá no sabés qué es lo que viene. Lo grabé en el estudio de Carlos Cutaia (N. de R: tecladista de Pescado Rabioso y La Máquina de Hacer Pájaros), con sonidos limpios sin compresores, un sonido bastante puro. Hay temas que tienen violines o guitarras acústicas. Me dio un poco de trabajo meter todo por debajo del violín o por debajo de las guitarras.
Yo digo que este disco es una obra temática, porque habla de las cuestiones morales, de las cuestiones éticas, del amor. Son como mensajes que me mandan del reino musical. En el tema “Amor es amor”, yo imagino que si es pasado en una radio, donde la gente está sufriendo, esa canción le va a hacer muy bien.

De no haber tenido inconvenientes con el estudio anterior, lo hubiera grabado en sesenta horas. Me sentí estafado por esta gente, donde me cambiaban las mezclas, hasta que decidí patear el tablero y me fui al estudio de Cutaia. Ahí lo metí en veinte días de seis horas.
Es un estudio muy copado donde me sucedió algo curioso. Había unos monitores muy buenos, pero no tenían los típicos Yamaha. Entonces la mezcla la escuchábamos por un televisor para ver los planos finales (risas).
Con la tecnología la verdad que no me llevo. ¡Se me rompieron los grabadores a cinta! Entonces, cuando se me ocurre una idea, me dejo un mensaje en el contestador, o lo escribo, o directamente está todo en mi cabeza. En este momento estoy preparando otro disco que está dividido en dos partes, blues y rock heavy. Siento la necesidad de hacerlo. Tengo 62 años. El Carpo ya se fue, Spinetta también. Con esto no quiero decir que tenga miedo de morirme, pero mi manager -mi guía espiritual como yo lo llamo- me manda los mensajes.

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Javier Bagalá
Fotos: Hugo J. Panzarasa